Es importante que hablemos de la cesárea y es importante que perdamos ese miedo que tenemos a que nos la realicen y esa sensación de fracaso que os acompaña cuando os comunicamos que es necesario practicarla.
NUNCA podemos vivirla como un fracaso o una decepción, siempre lo hacéis lo mejor que podéis o sabéis y os entregáis al máximo para que todo salga bien, pero no siempre es posible que vuestro bebé salga mediante parto natural. Hay que pensar que es un buen camino para el bebé y que será lo mejor para ambos.
ESCUCHA LA ENTREVISTA A LA DOCTORA MAGDALENA LECHUGA EN HOY POR HOY DE CADENA SER GRANADA (31/8/2022)
Existe la impresión generalizada de que se practican más cesáreas de las que se debería, el porcentaje o tasa de cesáreas recomendado por la OMS es de un 15 %.
Debemos plantearnos si esas cesáreas se practican según los criterios adecuados aunque todo eso también va a depender de los medios y recursos obstétricos y pediátricos neonatales de cada centro.
Hay muchas razones por las que a veces es necesario realizarla:
- Cuando existe lo que se denomina RIESGO DE PÉRDIDA DE BIENESTAR FETAL, el feto está incómodo y es necesario que nazca para evitar situaciones más complicadas.
- FRACASO DE INDUCCIÓN: si tras iniciar la inducción del parto con oxitocina ,tras 12 horas con contracciones activas no se objetiva modificación del cuello del útero, es decir no se inicia el proceso de dilatación( 9 horas en caso de tener una cesárea anterior) está indicada la realización de una cesárea.
- NO PROGRESIÓN DEL PARTO: cuando se inicia la fase activa del parto y no se progresa en dilatación o descenso de la cabeza fetal tras 4 horas-(3 en cesáreas anteriores).
- PRESENTACIONES ANÓMALAS FETALES : nalgas, situaciones inestables o transversas no corregibles
- DESPROPORCIÓN PÉVICO-CEFÁLICA: Cuando la cabeza fetal no entra adecuadamente en pelvis tras llegar a dilatación completa y tras un tiempo de pujos y dinámica.
Traer a tus hijos al mundo por cesárea no es peor que parir y no te hace menos madre, podrás vivir ese momento de una manera cercana y “humanizada”, haciendo de ese momento un gran momento.